El pilotaje es un método de cimentación que se utiliza en el proceso de construcción para distribuir de manera adecuada las fuerzas de carga que recibe un edificio.
Está indicado cuando las cimentaciones son tan densas que podrían ser peligrosas en términos de seguridad, o cuando se necesita de una estructura reforzada que permita a una edificación sometida a fuerzas horizontales (viento, el agua o tracción) sostenerse y conservar estabilidad.
A diferencia de otras clases de cimentación, como la sustitución o flotación, que dependen del cálculo del volumen de material sólido o líquido que desalojará la construcción, el sistema por pilotaje es un método puntual en el que el pilote se introduce en la tierra en busca de un estrato resistente que pueda soportar las cargas.
El proceso de construcción de pilotes de cimentación dependerá del tipo que se requiera, por ejemplo:
Cimentación rígida de primer orden. La punta del pilote se clava a gran profundidad en el terreno, de manera que se obtiene el soporte necesario en ese estrato.
Para hablar de cimentaciones profundas, la relación entre ancho y profundidad en ellas debe ser apropiada, haciendo posible, mediante el proceso descrito, transmitir cargas a los sustratos del suelo que por su resistencia sean aptos para ello.
Existen tres tipos de cimentación útiles a este propósito -muros de pantalla, pilotes y micropilotes- que se emplean bajo ciertas condiciones de construcción, por ejemplo:
Los pilotes que fabricamos en INGETEK son estructuras fabricadas en máquinas semiautomáticas bajo un proceso industrializado con medidas estandarizadas, lo cual nos permite contar con una amplia variedad de jaulas con diferentes diámetros y longitudes que se ajustan a la medida de cualquier proyecto.
Algunas de las ventajas que aporta el acero a los pilotes para los distintos tipos de cimentación, son su resistencia y la posibilidad de recuperar o modificar la longitud de los pilotes de cimentación por medio de cortes o soldadura, además de:
En INGETEK somos expertos en habilitación de aceros de refuerzo, lo que también incluye los procesos de cimentación profunda con pilotes, los cuales al ser fabricados bajo los principios de la ingeniería tecnificada, nos permite tener un proceso automatizado a prueba de errores, permitiéndonos garantizar que cuentan con la máxima calidad disponible listos para ser instalados.