Minería mexicana: ingeniería para una mayor seguridad

March 14, 2022

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    La minería mexicana extrae materiales de alto valor en el mercado, tales como el oro, la plata y el cobre. Gracias a ello, la industria genera múltiples empleos que, a su vez, fomentan el surgimiento de comunidades en torno a ella.

    Tanto que, de acuerdo con el Informe de Sustentabilidad 2020 de CAMIMEX, ese año el sector de la minería en México proyectó inversiones por 4,756 millones de dólares; probando ser una industria clave para la economía mexicana. Dicho eso, existen dos formas esenciales de minería:

    • Explotación minera a cielo abierto. Cualquier excavación por encima del terreno cuyo objetivo sea extraer un mineral determinado de un depósito natural.

    • Minería subterránea. Es la extracción de materias primas bajo tierra, a las que se accede a través de galerías conectadas con la superficie.

    Resulta importante determinar protocolos de seguridad minera en ambos casos, pues aunque presentan dificultades similares, el riesgo para los trabajadores es mayor en la minería subterránea.

    Principales riesgos para la minería en México

    En caso de sufrir accidentes de trabajo, la distancia entre minas y ciudades puede ser un detrimento para recibir pronta atención médica. Por otro lado, el mal manejo de explosivos y los derrumbes imprevistos suponen un riesgo considerable hacia la seguridad del personal, los activos y para la reputación empresarial.

    De ahí que sea indispensable reforzar las medidas preventivas y establecer protocolos de seguridad minera. Eso sí, las empresas mineras nacionales registraron en 2020 una tasa de incidencia de accidentes de 1.01 por cada 100 trabajadores; una reducción del 18.5% respecto a 2019. Para alcanzar este buen desempeño, las empresas del sector invirtieron más de 2,500 millones de pesos.

    Igualmente, buscando garantizar la seguridad minera a cielo abierto y bajo tierra, se prioriza la capacitación de los trabajadores de acuerdo con la NOM-023-STPS2012.

    Ahora bien, como respuesta a estos acontecimientos, han surgido apuestas por soluciones de ingeniería tecnificada como ARMINA, que busca salvaguardar la integridad de los mineros en su área de trabajo.

    ARMINA: una solución de Aceros de Refuerzo para la seguridad minera

    Las medidas previas ya han hecho avances valiosos buscando garantizar la seguridad minera a cielo abierto y bajo tierra.

    Sin embargo, ARMINA, solución desarrollada por DEACERO®, ha demostrado ser una solución dinámica que potencia dichos protocolos al estabilizar mediante Aceros de Refuerzo el suelo o macizo rocoso. Brindando así mayor seguridad durante la construcción de bóvedas en minas.

    Revestimientos proyectados

    Al aplicar esta técnica, se utiliza el Revestimiento de concreto proyectado (lanzado) con Fibras de Acero DEACERO® que se encarga de cubrir las cuñas del macizo rocoso con una capa estructural que funciona como membrana. De este modo, genera una estructura más sólida en los túneles mineros.

    Protección de caídos de roca

    Esta solución emplea Aceros de Refuerzo para impedir lo más posible la caída de roca producida debido a las alteraciones en el terreno. Esto es gracias a un sistema de anclaje que trabaja simultáneamente con una plantilla de barrenación, diseñada según las dimensiones de la hoja de malla minera.

    Por otro lado, buscando combatir la oxidación y la intemperización, el sistema puede complementarse con revestimientos proyectados, siempre que las condiciones del terreno lo permitan.

    De esta manera, podrás velar aún más por el bienestar de los trabajadores, hallando el punto medio de colaboración entre tus procesos existentes y la implementación de nuestras Soluciones de ingeniería tecnificada como ARMINA.

    En INGETEK, somos la única empresa certificada para la aplicación de esta y otras Soluciones innovadoras de Aceros de Refuerzo, que benefician a la industria minera y constructiva en gran medida. Comunícate y hagamos de tu proyecto una zona de trabajo segura.

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